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Las naranjas Majorca de Miguel

Si tu padre ha sido un ciclista famoso, es comprensible que quieras mantenerte lejos de las bicis - especialmente si tenéis el mismo nombre. Pero Miguel Indurain ha encontrado su propio camino. Después de licenciarse en administración de empresas, decidió pedalear por el amor a la aventura.

08 April 2019

Miguel Indurain hace honor a su nombre en sus pasos – o pedaladas – fácilmente. Nació con la pasión por el deporte, pero no encontró su camino a la bici hasta tiempo después.

“Descubrí el ciclismo cuando tenía doce años y desde entonces no he dejado de andar en bici. Al principio simplemente salía con los amigos. Era muy divertido, la libertad, la aventura, los bonitos paisajes. Por eso salgo en bici, por eso me gusta el ciclismo. Tengo muchos amigos gracias al ciclismo.”

Con algo de pedigree podrías esperar una pasión por la competición además de por ir en bici. Y por un tiempo Indurain probó ese camino.

“En torno a los 18 años, comencé a pensar en el ciclismo profesional. Entrené mucho. No sabía por qué lo hacía, en aquél momento sólo quería ir en bici con mis amigos, eso era todo. Después de tres años, decidí que no era mi camino. Ya no disfrutaba de la bici, así que lo dejé.”

Después de varios resultados prometedores, Indurain dejó la bici por completo - no sólo la competición. Pero como podrás imaginar, eso era ir demasiado lejos.

“Seis meses después me di cuenta de que no podía dejar el ciclismo del todo. Asi que descubrí otro tipo de ciclismo, saliendo en bici sólo por diversión, para explorar. Buscas tus límites y me sigue gustando sufrir, pero es bastante diferente. Ya no me preocupo por el pulso. Simplemente salgo y me divierto.”

Pasar de la vida monástica de entrenar-comer-dormir-repetir del ciclista que quiere ser profesional al horizonte mucho más amplio que puede ofrecer el ciclismo, sin limitaciones, es un gran cambio. Pero no faltan posibilidades.

“Ahora principalmente busco la libertad, la adrenalina, la diversión. Esos momentos en los que lo das todo, en los que vas al límite. Te sientes vivo.”

Así que, por lo menos, permanece la esencia del corredor. La búsqueda de emociones de Indurain no se limita a las dos ruedas.

“He probado el paracaidismo, pero dura muy poco. Hay mucha adrenalina, pero no dura lo suficiente. Con el ciclismo puedo hacer que dure más tiempo.” dice Indurain. Pero no sólo le importa ir a tope. “Tampoco me importa ir despacio. Por supuesto, es más cómodo, puedes ver mejor el paisaje, pero prefiero ir rápido.”

Entonces, ¿qué lleva Indurain consigo cuando sale en busca de aventura?

“Un cuchillo de acampada, de Francia. Es de mi padre. Es muy práctico cuando exploras sitios nuevos, nunca sabes cuándo podrías necesitarlo. Algunos días ni lo usas, quizás para algunas naranjas o cosas así. Pero me gusta llevarlo conmigo, por si acaso.”

¿Y qué piensas del culotte?

“Es mucho más cómodo con los bolsillos en el culotte. Es más seguro y fácil acceder a tus cosas. Tienes todo al alcance de la mano, no tienes que hacer ningún movimiento extraño. Teléfono móvil, llaves, gafas... hasta el cuchillo. Es un paso adelante en el ciclismo. Me gusta de verdad.”