Serpenteando por l’Hexagone, el Tour es la quintaesencia de lo francés, mostrando toda la gama de paisajes galos. Pero para la mayoría de nosotros, lo que cuenta son las montañas. Con el Tourmalet en el retrovisor, esta edición del Doppio digital revisa las llegadas en alto que quedan en el Tour de este año.
16 July 2019Parte de la historia del Tour desde 1910, el Tourmalet ha sido testigo del paso de la prueba en innumerables ocasiones, pero rara vez es final de etapa. Si la última vez de 2010 – una lucha entre Contador y Schleck envueltos por la niebla – sirve como referencia, será un espectáculo. Hay un premio de 5.000€ para el ganador en honor al segundo director de carrera del Tour, Jacques Goddet. Pas mal!
2115m
19km al 7.4%
Consejo: Tener el apoyo de un millonario viene bien cuando montas el mayor presupuesto del ciclismo. Cada pequeño detalle cuenta – creemos que el Ineos saldrá a tope para conseguir una pequeña inyección de dinero.
El nombre menos ilustre de esta lista con diferencia, el Prat d’Albis sube a las áridas montañas alrededor de Foix. Esta etapa no es una etapa corta, si no una larga y exigente que muy probablemente se disputará con mucho calor. La última subida es uno de los tres puertos de primera categoría, con lo que los fuegos artificiales en la clasificación general están asegurados.
1205m
12km al 6.9%
Consejo: Agradable pueblo con un laberinto de calles medievales en el centro, Foix no está lejos de la frontera con España y la influencia ibérica es evidente. Creemos que ésta podría ser una oportunidad para un buen escalador vasco.
Subiéndolo completo desde Bourg Saint Maurice, este ascenso es un monstruo de 30 km. El Tour afronta el último coletazo en la estación de esquí, pero no te preocupes, con el Iséran – la carretera asfaltada más alta de los Alpes – para ablandar las piernas de los ciclistas, será un duro examen. El último en subir se da un baño en las gélidas aguas del Lac de Tignes.
2113m
7.4km al 7%
El último en ganar aquí fue el deshonesto Dane Michael Rasmussen. Su compatriota Jakob Fuglsang este año está en forma y perfectamente podría despegar en la última subida.
En claro contraste con la temporada invernal en la estación de esquí más alta de Europa, el champagne sólo lo descorchará merecidamente el ganador de etapa y no impropios esquiadores. Y cuando decimos merecidamente, lo decimos en serio considerando esta última subida. Sin ser la más empinada, pero de lejos siendo la más larga del recorrido de este año, es una clara candidata para el título de la más dura, como descubrirán los participantes de la Etape.
2365m
33.4km al 5.5%
Al pasar junto remontes de esquí en plena subida, pensamos que el ex-saltador de esquí Primož Roglič recordará una vida anterior y clavará el aterrizaje para llevarse la victoria de etapa.